Brindo por la Ley.

Esta semana vivimos un hecho que como país nos hace dar vuelta una página.
La sola idea de pensar que tal vez en unos años dejemos de ser discriminadores y muy poco humanos, es alentadora.
Me pregunto que tendrá que ver lo que uno hace en su cama, o a quien uno ama, con quien es esa persona, si es bueno, si es malo, si es gracioso, trabajador o vago, buen amigo o gran hijo...
Me pregunto qué tendrá que ver...

¿Porqué le preocupará tanto a esta sociedad que ahora todos nos podamos casar? y no solo los hetersosexuales ¿?
No lo sé. Y más objeciones escucho, y más feliz me pongo por su aprobación. Porque todo carece de sentido cuando hablamos de Ley, de derechos y responsabilidades de las cuales TODOS debemos gozar.
Lo demás es puro cuento, forma parte de un libro... uno de ficción.


"Todos somos iguales ante los ojos del señor".
Dios debe estar contento, es una pena que sus adeptos
más fanáticos , nuevamente intenten en tierra lo que
haría añicos a la libertad social.